Los agentes de la educación.
LOS AGENTES DE LA EDUCACIÓN.
Los padres y la iglesia.
Los primeros maestros son los padres.
La responsabilidad primordial de la educación recae en los padres de familia, y dentro de estos, en especial, el padre (Sal 127:3-5).
Deut 6:6-10: aprender nosotros para enseñar a nuestros hijos, y que ellos enseñen a sus hijos (nuestros nietos).
La segunda institución ordenada por Dios que bíblicamente ha sido facultada para hacerse cargo del aspecto educativo, tanto de niños y jóvenes, como de adultos, es la Iglesia (y/o las instituciones educativas cristianas).
Todos nosotros: maestros.
Como parte de la iglesia, y por delegación expresa del Señor Jesucristo, todos los creyentes, de uno u otra manera, ejercemos una función educativa
2 Tim 2:2: lo que has aprendido de mi (1ª. Generación)) enseña (2da. generación) a hombres fieles (3ª. Generación) que sean idóneos para enseñar también a otros (4ta. Generación).
Mat 28;18-20: ir y hacer discípulos (3ª. Generación) enseñándoles (nosotros, 2da. Generación) a guardar lo que os he mandado (Jesús, 1ra. Generación).
Jer 15:19: que todos se conviertan al Señor.
Exo 3:6: Dios es un Dios multigeneracional. Está interesado en el cambio constante (Mat 9:16-17: de odres viejos a odres nuevos) (Fil 1:6)(Prov 4:18)(Isa 59:21). La iglesia somos los agentes de cambio de Dios:
• Mat 5:13-16: luz y sal.
• Mat 13:33: levadura.
Buenos maestros.
Fieles.
Dispuestos a ser enseñados y a cambiar.
Amar a las personas.
Fervor y tenacidad.
Pasión por enseñar, por comunicar
Siete principios estratégicos.
• La ley del maestro.
• La ley de la educación.
• La ley de la actividad.
• La ley de la comunicación.
• La ley del corazón.
• La ley del estímulo.
• La ley de la preparación.
Los padres y la iglesia.
Los primeros maestros son los padres.
La responsabilidad primordial de la educación recae en los padres de familia, y dentro de estos, en especial, el padre (Sal 127:3-5).
Deut 6:6-10: aprender nosotros para enseñar a nuestros hijos, y que ellos enseñen a sus hijos (nuestros nietos).
La segunda institución ordenada por Dios que bíblicamente ha sido facultada para hacerse cargo del aspecto educativo, tanto de niños y jóvenes, como de adultos, es la Iglesia (y/o las instituciones educativas cristianas).
Todos nosotros: maestros.
Como parte de la iglesia, y por delegación expresa del Señor Jesucristo, todos los creyentes, de uno u otra manera, ejercemos una función educativa
2 Tim 2:2: lo que has aprendido de mi (1ª. Generación)) enseña (2da. generación) a hombres fieles (3ª. Generación) que sean idóneos para enseñar también a otros (4ta. Generación).
Mat 28;18-20: ir y hacer discípulos (3ª. Generación) enseñándoles (nosotros, 2da. Generación) a guardar lo que os he mandado (Jesús, 1ra. Generación).
Jer 15:19: que todos se conviertan al Señor.
Exo 3:6: Dios es un Dios multigeneracional. Está interesado en el cambio constante (Mat 9:16-17: de odres viejos a odres nuevos) (Fil 1:6)(Prov 4:18)(Isa 59:21). La iglesia somos los agentes de cambio de Dios:
• Mat 5:13-16: luz y sal.
• Mat 13:33: levadura.
Buenos maestros.
Fieles.
Dispuestos a ser enseñados y a cambiar.
Amar a las personas.
Fervor y tenacidad.
Pasión por enseñar, por comunicar
Siete principios estratégicos.
• La ley del maestro.
• La ley de la educación.
• La ley de la actividad.
• La ley de la comunicación.
• La ley del corazón.
• La ley del estímulo.
• La ley de la preparación.
06
Ene
2009