La Grandeza de Dios y Su Gracia sobre nosotros.
La grandeza de Dios:
• Sal_8:1. No solo llena la tierra, llena todos los cielos.
• Ni los cielos lo pueden contener (1Re_8:27, 2Cr_6:18).
• En el Nuevo Testamento se citan porciones de este Salmo y se aplican a Cristo (1Co_15:27, Heb_2:6-8).
• Ello nos habla, entonces, también de la grandeza de Cristo, no solo como el Hijo del Hombre (finito) sino como el Hijo de Dios, una persona de la Trinidad (infinito).
• Dios se hizo hombre (menor que Dios) en la Persona de Cristo (Sal_8:5).
• Jesús es la única persona que refleja la imagen de Dios (Col_1:5, Jua_1:18. Jua_14:8-9).
Sal_8:2.
• Los niños parecen tener la facilidad de confiar en Dios y alabarlo sin dudas ni reservas.
• Muchos de nosotros, con el paso del tiempo, se nos hace más difícil hacerlo.
• La Palabra de Dios nos enseña que para entrar en el Reino necesitamos ser como niños (Mat_18:3).
• Ello implica que en lugar de minimizarlos (hacerlos de menos) necesitaríamos observarlos en su relación y actitud para con Dios y ser imitadores de ellos:
• Su credulidad frente a nuestra incredulidad.
• Su inocencia frente a nuestra malicia.
• Su sencillez frente a nuestra complejidad.
• Su confianza frente a nuestras dudas, inseguridades, etc.
Sal_8:3-4.
• Este pasaje nos debería poner en perspectiva de dos cosas:
• De nuestra pequeñez frente a la naturaleza de Dios, y mayormente, frente a Él que es aún mayor que toda Su Creación.
• El privilegio que tenemos de que, a pesar de nuestra insignificancia, Dios tiene cuidado de nosotros:
• En primer lugar, de todos los seres humanos frente a sus necesidades de supervivencia (Mat_5:45).
• Cuanto más en cuanto a nuestra salvación inmerecida, por Gracia (Efe_2:8-9), y todo lo que implica: perdón de pecados, redención, sanidad, liberación, restauración, adopción, justificación, santificación, seguridad, protección, fortaleza, etc.
• A pesar de nuestras imperfecciones, a pesar de la pecaminosidad anterior (y aun eventualmente la actual), Dios nos hizo un poco menor que Él (a Su imagen y semejanza, Gen_1:27).
• Ello tiene varias implicaciones:
• Ser libres del rechazo, fundamentar nuestra identidad, valor, dignidad, respeto a los demás, etc., en ello independientemente de lo que digan los demás (Gal_1:1).
• Volvernos de todo corazón a Él que nos ha amado con tal amor, que no solo nos hizo a Su imagen y semejanza, sino que envió a Cristo a morir por nosotros para que pudiéramos ser santificados y vivir con Él por la eternidad, no separados de Él.
• Vivir en agradecimiento 24/7 por esta salvación tan grandes (1Ts_5:18) y cuidarla diligentemente (Heb_2:1-3).
• Gen_2:15. El Señor, además de todo ello, nos puso a cargo de toda Su Creación para que la guardáramos (cuidáramos, le diéramos el mantenimiento necesario) y para que la labráramos (la desarrolláramos para obtener de ella todo su potencial para la bendición de toda la humanidad, Gen_1:28).
• Pero esa gran autoridad, implica no el "derecho" de hacer con la Creación de Dios lo que nos de la gana, sino que la administremos de tal manera que sea para la Gloria de Él (Col_3:23-24).
• Y de ello vamos a tener que rendir cuentas en algún momento (Mat_25:14-30) por la forma en la que la usamos (que debiera ser de bendición para toda la humanidad y principalmente para los desposeídos, necesitados, desprotegidos, etc., Mat_25:35-40, Pro_31:8-9).
Sal_8:9.
• Ante la grandeza y majestuosidad en la naturaleza, en nuestra creación y en nuestra salvación, no podemos menor que:
• Rendirnos ante Él y reconocer toda Su Grandeza.
• Reconocer que Él es Dios y sujetarnos a Su Gobierno amoroso (Rom_10:8-10)
• Estar permanentemente agradecidos por tanto Amor, Misericordia, Gracia, Favor, Benignidad, Bondad, Paciencia, etc., que ha tenido:
• Con todos los seres humanos a lo largo de toda la historia.
• Y principalmente con cada uno de nosotros.
• Y más aún si hemos sido adoptados como Sus hijos (Jua_1:12, Rom_8:15-16).
• Sal_8:1. No solo llena la tierra, llena todos los cielos.
• Ni los cielos lo pueden contener (1Re_8:27, 2Cr_6:18).
• En el Nuevo Testamento se citan porciones de este Salmo y se aplican a Cristo (1Co_15:27, Heb_2:6-8).
• Ello nos habla, entonces, también de la grandeza de Cristo, no solo como el Hijo del Hombre (finito) sino como el Hijo de Dios, una persona de la Trinidad (infinito).
• Dios se hizo hombre (menor que Dios) en la Persona de Cristo (Sal_8:5).
• Jesús es la única persona que refleja la imagen de Dios (Col_1:5, Jua_1:18. Jua_14:8-9).
Sal_8:2.
• Los niños parecen tener la facilidad de confiar en Dios y alabarlo sin dudas ni reservas.
• Muchos de nosotros, con el paso del tiempo, se nos hace más difícil hacerlo.
• La Palabra de Dios nos enseña que para entrar en el Reino necesitamos ser como niños (Mat_18:3).
• Ello implica que en lugar de minimizarlos (hacerlos de menos) necesitaríamos observarlos en su relación y actitud para con Dios y ser imitadores de ellos:
• Su credulidad frente a nuestra incredulidad.
• Su inocencia frente a nuestra malicia.
• Su sencillez frente a nuestra complejidad.
• Su confianza frente a nuestras dudas, inseguridades, etc.
Sal_8:3-4.
• Este pasaje nos debería poner en perspectiva de dos cosas:
• De nuestra pequeñez frente a la naturaleza de Dios, y mayormente, frente a Él que es aún mayor que toda Su Creación.
• El privilegio que tenemos de que, a pesar de nuestra insignificancia, Dios tiene cuidado de nosotros:
• En primer lugar, de todos los seres humanos frente a sus necesidades de supervivencia (Mat_5:45).
• Cuanto más en cuanto a nuestra salvación inmerecida, por Gracia (Efe_2:8-9), y todo lo que implica: perdón de pecados, redención, sanidad, liberación, restauración, adopción, justificación, santificación, seguridad, protección, fortaleza, etc.
• A pesar de nuestras imperfecciones, a pesar de la pecaminosidad anterior (y aun eventualmente la actual), Dios nos hizo un poco menor que Él (a Su imagen y semejanza, Gen_1:27).
• Ello tiene varias implicaciones:
• Ser libres del rechazo, fundamentar nuestra identidad, valor, dignidad, respeto a los demás, etc., en ello independientemente de lo que digan los demás (Gal_1:1).
• Volvernos de todo corazón a Él que nos ha amado con tal amor, que no solo nos hizo a Su imagen y semejanza, sino que envió a Cristo a morir por nosotros para que pudiéramos ser santificados y vivir con Él por la eternidad, no separados de Él.
• Vivir en agradecimiento 24/7 por esta salvación tan grandes (1Ts_5:18) y cuidarla diligentemente (Heb_2:1-3).
• Gen_2:15. El Señor, además de todo ello, nos puso a cargo de toda Su Creación para que la guardáramos (cuidáramos, le diéramos el mantenimiento necesario) y para que la labráramos (la desarrolláramos para obtener de ella todo su potencial para la bendición de toda la humanidad, Gen_1:28).
• Pero esa gran autoridad, implica no el "derecho" de hacer con la Creación de Dios lo que nos de la gana, sino que la administremos de tal manera que sea para la Gloria de Él (Col_3:23-24).
• Y de ello vamos a tener que rendir cuentas en algún momento (Mat_25:14-30) por la forma en la que la usamos (que debiera ser de bendición para toda la humanidad y principalmente para los desposeídos, necesitados, desprotegidos, etc., Mat_25:35-40, Pro_31:8-9).
Sal_8:9.
• Ante la grandeza y majestuosidad en la naturaleza, en nuestra creación y en nuestra salvación, no podemos menor que:
• Rendirnos ante Él y reconocer toda Su Grandeza.
• Reconocer que Él es Dios y sujetarnos a Su Gobierno amoroso (Rom_10:8-10)
• Estar permanentemente agradecidos por tanto Amor, Misericordia, Gracia, Favor, Benignidad, Bondad, Paciencia, etc., que ha tenido:
• Con todos los seres humanos a lo largo de toda la historia.
• Y principalmente con cada uno de nosotros.
• Y más aún si hemos sido adoptados como Sus hijos (Jua_1:12, Rom_8:15-16).
04
Oct
2023