Estudio Bíblico

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Sanidad y liberación del rechazo.



RECHAZO.


Introducción.
• El rechazo es una de las reacciones más comunes y más dañinas para nuestro corazón, que experimentamos los seres humanos (Prov_4:23, Heb_12:15).
• Es uno de los motivadores más fuertes de una vida que no ha hecho del Señor el centro de toda su vida, y un resultado directo de vivir la vida egocéntrica (a nuestra manera, buscando agradar a otros en lugar de agradar a Dios, Gal_1:10).
• Nos convierte en esclavos de las personas en lugar de siervos de Dios.
• Nos dirige a vivir bajo la presión ocasional y permanente (lo más seguro) del "que dirán".

¿Cómo surge el rechazo?
• Cuando hacemos algo que no nos gusta (auto rechazo)
• Cuando otra persona hace algo que no nos gusta (rechazo a otros).
• Cuando hacemos algo que no le gusta a otra persona (rechazo contra nosotros).

El rechazo surge en el momento mismo de la caída (pecado) de Adán y Eva, y por lo mismo se transmite a todos nosotros:
• Estaban desnudo y se cubrieron con hojas de higuera (temor al rechazo de Dios).
• Se escondieron porque tuvieron miedo (temor al rechazo de Dios).
• Adán: "La mujer que me diste" (Gen_3:7: rechazo entre ellos y rechazo a Dios).
• En resumen: Prov 16:25: caminos que les parecen derechos en su propia opinión pero su fin es camino de muerte.

Aquellos que se sienten rechazados por lo general tienden a:
• Apartarse de aquellos que los han hecho sentir rechazados.
• Rechazar a los que los han rechazado (de esa manera se establece un ciclo de heridas no perdonadas, resentimiento y represalias en el corazón de las personas).
• Pretender evitar el rechazo amoldándose a la voluntad de los demás (lo que puede dar lugar a relaciones de manipulación, control, abuso).
 
Tipos de rechazo.
• Auto-rechazo: cuando una persona se excluye a sí misma de una relación positiva consigo misma o con Dios por no estar de acuerdo en ciertas actitudes, acciones, decisiones, etc.
• Rechazo social: situación en la que una persona es excluida en forma deliberada, o no, de una relación o interacción social por no estar de acuerdo en ciertas actitudes, acciones, decisiones, etc., del grupo o que el grupo no esté de acuerdo con las de la persona rechazada.
• Puede ser activo, mediante el acoso, la ridiculización, etc., o pasivo, mediante ignorar a la persona.
• La persona rechazada percibe el rechazo de manera subjetiva, y el mismo puede ser un hecho real o puede ser percibido por la persona rechazada aun cuando en realidad el rechazo no está presente (imaginario).
 
Inevitabilidad del rechazo.
Ciertos niveles de rechazo son inevitables-
• Vivimos en un mundo de pecado, de egoísmo, donde las personas en por lo menos alguna medida hacen y pretenden que los demás hagan las cosas a su manera, y cuando no lo hacen, las rechazan.
Puede convertirse en un problema serio cuando:
• Es prolongado o consistente.
• Cuando la relación es importante para la persona rechazada.
• Cuando la persona es muy sensible al rechazo por experiencias pasadas de rechazo de las personas importantes en su vida.
 
Consecuencias del rechazo.
La persona va a experimentar:
• Enfocarse en sí misma:
• En sus sentimientos,
• En juzgarse continuamente (autocrítica), auto condenación, auto culpabilidad.
• Autocompasión,
• Ensimismamiento (encerrarnos en nosotros mismos).
• Cerrarse a la comunicación con otros).
• Incapacidad de expresar sus sentimientos, aislándose emocionalmente (temor al rechazo).
• Sentir que la vida no vale la pena, deprimirse fácilmente.
• Indisciplina e irresponsabilidad (dejar de hacer cosas como venganza pero que pueden ocasionar que los demás lo rechacen nuevamente).
• O perfeccionismo consigo misma tratando de ganar la aceptación de los demás.
• Llenarse de preocupaciones, dudas y temores respecto a lo que los demás piensan y/o dicen de ella.
• Tratar por todos los medios de "agradar a los demás" (esclavitud al "que dirán").
• Responder solo lo que considera que otros desean oír.
• Sentir que cada conversación se refiere a ella y tomársela como algo personal.
• Aferrarse fuertemente a aquellas personas que le manifiestan algún grado de aceptación.
• Sentimientos encontrados de amor y odio hacia otros (aceptación verbal pero rechazo emocional).
• Resentimiento, amargura y desconfianza hacia las demás personas.
• Rebelión contra la autoridad (cuando percibe que la están rechazando).
• Incapacidad de aceptar o de expresar amor.
• Dificultad para tolerar a otros, pasar poco tiempo con otros.
• Proveer poca dirección a otros si se es autoridad sobre ellos (temor al rechazo de la dirección, o venganza por el rechazo percibido, para que hagan mal su trabajo).
• Hostilidad hacia otros: haciendo declaraciones abiertas de rechazo, abuso físico, sexual, emocional, mental.
• Hacer demasiadas decisiones por los demás, “protegiéndolos” porque no confía en otros (una forma de rechazarlos por desconfianza).
• Rechazar a cualquiera que le recuerde a alguien que le ha rechazo.
En resumen, la experiencia del rechazo puede producir varias consecuencias adversas:
• Soledad.
• Falta de identidad, desvalorización.
• Agresión, depresión.
• Inseguridad, temor, indecisión.
• Vivir para satisfacer a los demás, preocupación por el ¿Qué dirán?
• Susceptibilidad a la manipulación y control de otros, y al abuso.
• Decepción, pensamientos de suicidio, falta de iniciativa.
• Etc.
 
El ciclo del rechazo.
• Es el proceso que experimentaron Adán y Eva con respecto a Dios en el Jardín del Edén una vez que hubieron pecado, a pesar de que Dios no los estaba rechazando en ningún momento, ellos le rechazaron, incluso culpando a Dios por su pecado. Gen 3:7-13.
• Es el proceso que experimentó Caín cuando él y Abel presentaron sus ofrendas delante del Señor y que desencadenó el primer asesinato en la historia humana. Gen 4:1-10.
• Es el mismo proceso que experimentó Jonás cuando desobedeció a Dios una vez que Él le había enviado a Nínive, y que volvió a experimentar en Nínive una vez vueltos al Señor los habitantes de esa ciudad. Jonás 1:6-15. Jonás 4:1-3.

¿Cómo se desarrolla el ciclo de rechazo?
Más o menos sigue este proceso:
• La persona piensa o siente que es rechazada o no amada por otra u otras personas.
• La persona que piensa o siente que es rechazada o no amada decide permitirles a esos pensamientos y/o sentimientos que la controlen.
• La persona rechazada reacciona rechazándose a sí misma y/o a otros o buscando aceptación de los demás (tomando como guía de su vida el "que dirán" en lugar de lo que Dios dice en Su Palabra).
Como consecuencia, se Inicia de nuevo el ciclo:
• Las personas a las que está rechazando o está buscando su aprobación para no ser rechazado pueden reaccionar rechazándola nuevamente y así sucesivamente.
El rechazo y las reacciones derivadas se convierten, poco a poco, en une estilo de vida que afecta a la persona total.
• Cada vez la persona rechazada va experimentando menos plenitud, abundancia, bendición y victoria en su vida.
• El rechazo se convierte en una arma del diablo para robar, matar y destruir la vida abundante que Cristo pagó para nosotros en la Cruz del Calvario (Jua_10:10).
 
Reaccionando en rechazo hacia Dios.
Como consecuencia de vivir una experiencia constante de rechazo, la persona puede llegar incluso a desarrollar actitudes de rechazo a Dios.
Algunas de esas actitudes son:
• Ver a Dios como un tirano, no como el Padre bueno que es.
• Estar enojado con Dios, el Padre.
• Discutir las cosas que Dios permite en nuestras vidas o en las vidas de otros.
• Reclamarle a Dios por las situaciones, circunstancias y experiencias que ha permitido en nuestras vidas y a nuestro alrededor.
• Estar inconformes y quejarnos constantemente de la vida que nos h tocado vivir.
• No ser capaz de confiar en Dios.
• Etc.
Como resultado de ello, y de algunas otras cosas por el estilo, se privan a sí mismos (y a sus familias muchas veces) de conocer el amor del Padre que excede a todo conocimiento.

Pero algo también trágico, es que muchos que han conocido a Dios, el Padre, a pesar de todo lo que la Palabra y la experiencia de vida nos muestra de la bondad de Él, aún así siguen manifestando algunas de esas expresiones de rechazo hacia Él, además de otras, como por ejemplo:
• Resistir a la autoridad de Dios.
• Tener realmente poco compañerismo y/o comunión con Dios.
• No ser capaz de recibir el amor de Dios.

Superando el rechazo.
El que recibimos:
• Aún cuando no lo queramos, en algunos momentos, situaciones y circunstancias vamos a sentir o pensar que somos rechazados (es inevitable).
• Lo que si podemos evitar es que dañe nuestro corazón (Pro_4:23).
• No permitirle a esos pensamientos o sentimientos que nos controlen.
• Decidir pensar y creer lo que Dios dice de nosotros: amados, benditos, escogidos, sin culpa, adoptados, aceptados, redimidos, perdonados (Efe_1:3-8).
• Decidir amar a las personas que nos puedan estar haciendo pensar o sentir rechazo (Jua_13:34-35) (Mat_10:8)(Luc_6:27-28).
El que damos (juicio, chisme, crítica, murmuración, etc.)(incluye el rechazo a Dios).
• Arrepentimiento y confesión (1Jn_1:9)(1Pe_5:5).
• Pedir perdón a aquellos que hayamos ofendido de esa forma (Mat_5:23-24).
• Hacer morir el orgullo y similares en nosotros (Jua_3:30).
• Pedirle al Espíritu que transforme nuestro corazón y nos enseñe humildad (Gal_5:22-23)(Mat_11:29)

Conclusiones.
• El rechazo nos sucede a todos. Aún Cristo fue rechazado (Jn 1:11): "A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron."
• El rechazo puede ser real o supuesto, sutil o directo, hacia nosotros mismos, hacia otros, de otros hacia mí, y hacia Dios.
• Un ciclo o círculo de rechazo comienza cuando permitimos que los pensamientos y los sentimientos de rechazo nos controlen.
• La persona que cree que es rechazada y no amada, toma decisiones que refuerzan ese punto de vista.
• Estas decisiones crean un estilo de vida que atrae más rechazo sobre la persona.
• La única forma de salir de cualquier ciclo de rechazo es escogiendo creer lo que somos en Cristo y gobernar nuestros pensamientos y sentimientos mediante lo que dice la Palabra de Dios y nos guía el Espíritu Santo.
• No puedo culpar a otros por sus pensamientos y sentimientos pero si soy responsable de mis propios pensamientos y sentimientos.
• Las personas que viven en el ciclo de rechazo reaccionan de forma que llegan a estar centradas en sí mismas. También reaccionan rechazando a otros y a Dios mismo.
• Reaccionar rechazando a otros es venganza: "tú me lastimas, yo te lastimo". Y la venganza es contraria a la voluntad de Dios.
• Para superar el rechazo que recibimos necesitamos estar centrados no en lo que piensan o nos hacen sentir las demás personas, sino en lo que Dios dice de nosotros y amar a esas personas.
• Para superar el rechazo que damos hacia otros necesitamos arrepentirnos, pedirle perdón a Dios, negarnos a nosotros mismos y pedirle al Espíritu Santo que nos transforme en personas humildes.

04 Oct 2022