Estudio Bíblico

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La Epístola de Santiago (3). 1:12-18. Tentación y lo bueno de Dios.



Sant 1.12-15.
Soportando la tentación.
Bienaventurado, sumamente dichoso (satisfacción personal).
La corona de vida.
Como no hay una sola persona en el mundo que pueda soportar todas las tentaciones, siempre, esto ha de significar que cada vez que resiste una tentación recibe una corona de vida, que puede ser la moneda de la eternidad (significaría que tiene una recompensa acumulativa guardada en la eternidad, tesoro en el cielo).
Los que resisten la tentación porque le aman (no por conveniencia), porque en Sus corazones tienen verdadero temor de Dios.
El proceso de la tentación.
Dios no nos tienta de ninguna manera, sería contra Su propia naturaleza (justificar el caer en la tentación por los problemas del pasado, la niñez, la adolescencia, etc., y atribuirle a Dios la culpa de ese pasado).
Caer en la tentación y en el pecado es la responsabilidad personal de cada uno (ni siquiera del diablo; él hace su trabajo, nosotros caemos).
Puede aparecer de una manera inesperada aunque sea que estemos firmes en la fe.
Tiene por objeto llevarnos a desobedecer la voluntad de Dios: no hacer lo bueno, hacer lo malo, aunque si estamos en Cristo no nos debería hacer caer (tambalear tal vez, caer no).
1 Cor 10:12-13: Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga. No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar."
La tentación siempre tiene su origen en última instancia, en el infierno.
Puede venir a nosotros por la influencia del mundo en nuestra carne.
Pero la principal responsable de la tentación es la carne (cada uno es tentado por su propia concupiscencia: deseos desordenados, pasiones, emociones, de la carne).
Al venir la tentación se inicia un proceso en el alma egocéntrica, el falso yo, el ego, la carne:
Atracción: ser impulsado o atraído por un deseo interior no conforme a Dios.
Seducción: caer en la trampa, ser enredado, autoengañarse, autojustificarse, excusarse.
Concepción: diseñar un método para cumplir el deseo.
Da a luz: ejecutar la conducta desobediente a Dios.
Muerte: la pérdida de bendiciones de parte de Dios, nuestra separación de Él por la vergüenza o la dureza del corazón después del pecado, la acusación, juicio, culpa y condenación que trae el diablo después del pecado.

Sant 1:16-18.
El contraste entre la tentación y el amor a Dios.
No erréis: tengamos claro que es que y Quién es quién, que no nos confundamos por ignorar las Escrituras (Jn 5:3, Ose 4:6).
El diablo, sus mentiras y tentaciones: para nuestro mal.
Dios, sus bendiciones y Su Palabra: para nuestro bien.
El amor del Padre:
Es Padre de las luces, no de las tinieblas; de lo bueno, no de lo malo.
Bueno es lo que Dios dice que es bueno, malo es lo que Dios dice que es malo.
No le importa lo que el ser humano piense al respecto: Él lo estableció, es Dios, a nosotros solo nos resta obedecerlo (en Él no hay mudanza ni sombra de variación).
No tiene que gustarnos, no tiene que agradarnos, no tenemos que estar de acuerdo.
Obediencia es obediencia aún en las peores condiciones posibles (como los soldados: una ley no se discute, se obedece).
Todo lo bueno (que Él dice bueno) y todo don perfecto (las manifestaciones de Su Carácter y de Su hacer en nosotros), descienden de Él, por gracia por medio de la fe, para que nadie se enorgullezca (Efe 2:8-9).
Todo lo que recibimos de Él es por gracia, nada por nuestros méritos, porque somos Sus hijos por la abundancia de Su Gracia. (Efe 1:3-14).
Nos hizo nacer por la Palabra de Verdad (la simiente incorruptible, 1 Ped 1:23) para que lleguemos a ser participantes de Su Naturaleza Divina (2 Ped 1:3-4).
Para que seamos los primeros frutos de Su Nueva Creación (la primicia de la Nueva Tierra, el Nuevo Cielo y la Nueva Jerusalén).
Los hijos mayores de toda Su Creación (Jesús no es creado).
La flor, el adorno, de su Nueva Creación.

17 Mar 2022